Qué complicado es estar en el aula observando a los niños sin ser observado por ellos, o sin que ellos se den cuenta de que les están observando.
Es como si pudiésemos estar al otro de una pared mirando por un agujerito. Porque a veces los niños hacen lo que nosotros queremos ver; porque a veces los niños necesitan una mirada del adulto para dar un paso más; porque a veces los niños se sienten juzgados en cada acción.
¿Podemos mirar desde un agujerito?
Es como si pudiésemos estar al otro de una pared mirando por un agujerito. Porque a veces los niños hacen lo que nosotros queremos ver; porque a veces los niños necesitan una mirada del adulto para dar un paso más; porque a veces los niños se sienten juzgados en cada acción.
¿Podemos mirar desde un agujerito?
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